El tiempo ya invita a cocinar, a llenar la casa de aromas acogedores.
Para mí, esta es la época de las mermeladas, las preparo en el pueblo y como ya empieza a refrescar al atardecer, aprovecho para meterme en la cocina y cacharrear.
Hoy os traigo una mermelada de peras con un sutil aroma a canela y clavo, muy fácil de preparar y muy rica.
- 1 kg. de peras, si las tenéis de vuestro propio árbol, de un vecino, pariente o amigo, mucho mejor.
- 400 gr. de azúcar, a mí me gusta con poco azúcar, así que si os gusta más dulce podéis aumentar la cantidad hasta 600 gr.
- un palito de canela
- 5 clavos de olor
- cucharadita de pectina en polvo
Preparación:
Pelar y trocear las peras, colocar en una olla con el palo de canela partido y los clavos de olor y poner a fuego medio hasta que empiece a hervir. Yo no añado agua porque suelo usar peras muy maduras y sueltan ellas solas bastante jugo, pero si usáis una variedad más seca tendréis que añadir medio vasito de agua.
Bajar el fuego y revolver para que no se pegue, no hace falta revolver continuamente, pero sí de vez en cuando.
Cuando la pera esté deshecha, puede quedar algún cachito, añadir el resto del azúcar mezclada con la pectina y mezclar bien para que no salgan grumos y dejar que empiece a hervir, entonces retirar del fuego.
Si te gusta con trocitos déjala así, si te gusta más fina puedes pasarla por la batidora o el pasapuré.
Verter en frascos esterilizados, cerrar y poner al baño María al menos 20 minutos, dejar enfriar en el agua.
Etiquetar y disfrutar.
Es perfecta para el desayuno.
¿Qué os parece?¿Verdad que es muy fácil?
Espero que os animéis y me contéis el resultado.
¡¡Hasta pronto!!
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